El compositor y director de Orquesta Augusto Algueró falleció este domingo a los 76 años a causa de una parada respiratoria, en Torremolinos, donde residía desde hace unos años, informó la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE).
Socio y miembro desde mayo de 1995 de la Junta Directiva de la SGAE, la capilla ardiente se instalará hoy lunes en la sede madrileña de esta sociedad para que todos los ciudadanos que lo deseen den su último adiós a una de las figuras «más importantes de la música popular de todos los tiempos«.
Recibió en 2005 el Premio de Honor en reconocimiento «a su brillante trayectoria profesional y a su decisiva contribución a la música popular». «La música es el lenguaje más universal que existe y a ella le he entregado mi vida entera», afirmó entonces el también arreglista, conocido además por componer importantes temas, pertenecientes ya al imaginario colectivo, como Penélope (Serrat), Noelia (Nino Bravo), Tómbola (Marisol) y La chica ye-yé (Concha Velasco).
Además compuso bandas sonoras para el cine, como El ruiseñor de las cumbres con Joselito o Zampo y yo, con Ana Belén; y colaboró en unas cincuenta obras de teatro, entre las que se figura Mamá, quiero ser artista, con Concha Velasco.
Comenzó su carrera musical a principios de los años 50, con tan sólo 16 años.La gran mayoría de sus canciones fueron compuestas sobre letras de Antonio Guijarro y cantadas por famosos artistas españoles fueron un éxito. Así su nombre se hizo muy popular en España y en América.
Compuso más de 500 canciones y cerca de 200 bandas sonoras Fueron muchos cantantes los que solicitaron su colaboración y así compuso canciones para los Cinco Latinos, Connie Francis, Marisol, Elsa Baeza, Rocío Jurado o Juan Manuel Serrat.
Como compositor y director, representó a España en los festivales de Eurovisión y de la OTI. Compuso la canción con la que España participó por primera vez en Eurovisión, en 1961, Estando contigo, interpretada por Conchita Bautista, y el exitoso Vivo cantando, con el que ganó Salomé ese certamen, en 1969.
Entre las últimas composiciones que hizo para el cine están, Torrente, el brazo tonto de la ley (1998), primera película como director de Santiago Segura, y «Primer y último amor» (2002), de Antonio Giménez Rico.