Pasado 28 de octubre ha llegado a las tiendas el nuevo tan esperado disco de Arcade Fire. El doble disco «Reflektor» con 13 canciones es el cuarto trabajo del estudio de este colectivo canadiense y probablemente el mejor.
Esa base de sonidos ancestrales se debe a un viaje que Win Butler y su mujer Régine Chassagne hicieron a Haití, país natal de Régine, lugar donde mucha gente no conoce nada la música occidental y no habían oído hablar sobre The Beatles, Michael Jackson o Madonna. Convertir ese sonido ancestral haitiano en algo más pop les ayudo músico y productor, frontman de LCD Soundsystem, James Murphy.
Después de escuchar una sola vez «Reflektor» queda muy claro, por muy difícil que parezca, que éste le gana por goleada a su antecesor, el alabado y galardonado «The Suburbs». Sin quitarle el mérito a «The Suburbs» he de decir que la música de «Reflektor» es mucho más viva, a pesar de todo tipo de movidas electrónicas utilizadas.
Totalmente desahogado y relajado. Ni rastro de monumentalismo de «The Suburbs». Arcade Fire aquí demuestran todo su poderío de actuaciones en vivo. En la grabación del álbum se ha conservado lo más complicado de conservar: la energética de sus conciertos.
Cuesta elegir una sola canción. En «Reflektor» prácticamente cada uno de los temas podría pretender a ser un éxito. Se nota que los músicos se lo pasaron en grande grabando este disco. Y se nota que el éxito les gusta mucho pero en este mundo de los Biebers y Timberlakes Arcade Fire persigue tan solo un objetivo – seguir haciendo lo que más les gusta.
La demostración más clara de ello es este vídeo de una actuación en directo junto a Neil Young en el concierto benéfico de Bridge School. La canción se titula… «I Dreamed a Neil Young Song» («He soñado la canción de Neil Young»).
Según cuenta Win Butler, le vino en un sueño que él y otros músicos del grupo tocaban este tema durante la comprobación de sonido. Luego Win se despertó y apuntó esa canción de memoria.
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=tLnOxq-Gydw[/youtube]