Hace menos de tres días se confirmaba el telonero que abriría el concierto de ayer, de los Rolling Stones, en el Campo del Santiago Bernabéu: Leiva, ex lider del grupo madrileño pereza. Leiva emocionado por subir al escenario que después pisarían los septuagenarios músico ingleses, posó para su instagram con la foto de uno de los discos de los Rolling, con este lema: «Soy el telonero de los Stones en el Bernabeu con mi Leiband.. Seeee!!»
Leiva dió todo en el concierto y amenizó la enfervorecida espera con tema propios y de su anterior banda Pereza.
Pero el Bernabéu estalló con estos demonios ya arrugados. Mick Jagger y Keith Richards, los más representativos comenzaron rompiendo las apuestas y cantando «Jumpin Jack Flash». Todavía con los contoneos que hicieron famoso a Mick hace 52 años irrumpió en el escenario con las chaquetas ajustadas también de hace 50 años. Fue un espectáculo entre lo decadente y lo sublime.
Tal y como son ellos, sin dejar a nadie indiferente, dieron un concierto de unas dos horas largas. No pudiendo alargarse por las quejas de los vecinos ante las cuatro horas de conciertazo de Bruce Springsteen que dió en Madrid el 17 de junio de 2012.
Los Rolling Stones han cumplido el sueño de mucho jóvenes dando un concierto en España 32 años después del que dieron por primera vez en Madrid, ante 54.000 espectadores, y habiendo batiendo un récord de entradas vendidas en menor tiempo. Estos viejitos se pueden dar por satisfechos.