El Burj Al Arab (en idioma árabe, «Torre arábica») es un hotel de lujo con una altura de 321 metros, siendo el segundo hotel más alto de todo el mundo (superado sólo por el Rose Rotana Hotel) y uno de los edificios hoteleros más representativos. Está situado en el mar, sobre una isla artificial localizada a 270 metros de la playa en el Golfo Pérsico, la cual está conectada a tierra firme mediante una carretera.
El hotel está catalogado como de siete estrellas, categoría que va más allá de la clasificación normal de los hoteles, de uno a seis, debido a sus características realmente excepcionales que lo diferencian de cualquier otro tipo de hotel en el mundo. El Burj Al Arab no tiene habitaciones normales, sino que cuenta con 202 suites dobles. La más pequeña de estas suites ocupa un área de 169 m², mientras que la mayor cubre un área de 780 m². La suite Real cuesta 28.000 dólares la noche. También tiene un servicio de automóviles Rolls-Royce de lujo disponible para cada huésped.